Las entidades financieras españolas debían en diciembre de 2014 al Banco Central Europeo (BCE) un total de 141.338 millones de euros, lo que supone un descenso del 30% en comparación con un año antes (201.865 millones de euros).
Estas cifras suponen un mantenimiento en el umbral de los niveles mínimos que asola a la banca española desde hace tres años. En concreto, desde enero de 2012, según los datos provisionales publicados este miércoles por el Banco de España.
Con respecto al mes precedente, el importe de la deuda bajó un 6,5%, ya que en noviembre la cifra ascendió hasta situarse en los 150.994 millones de euros.
Bajo estas premisas, según datos del Banco de España publicados este miércoles, la deuda de las entidades financieras españolas con el BCE encadena cuatro meses de moderación.
En cualquier caso, la banca española acapara el 27,9% del total de los créditos concedidos por el BCE a las entidades financieras a cierre del mes de diciembre.
El total de créditos concedidos por el BCE se situó en 506.285 millones de euros en diciembre, un 6,6% más que en el mes de noviembre y un 24% menos que hace un año.
La deuda de las entidades financieras se incrementó en casi 80.000 millones de euros en marzo de 2012 y superó los 200.000 millones. Ahora se sitúa claramente por debajo de esta barrera y muy lejos del máximo de 388.736 millones registrado en agosto de 2012.
Este importe es el saldo vivo que las entidades residentes en España aún tienen pendiente de devolver al instituto emisor europeo como consecuencia de la financiación que el organismo les ha concedido previamente.
