Una chica de 16 años perdió la vida ayer en la piscina de un chalé próximo a la cala de la Llobella, en Benissa. La joven, que era rumana, había llegado la víspera a España junto a su marido para pasar en el chalé de un conocido en Benissa un par de días de vacaciones. En la vivienda, también había más amigos, igualmente rumanos. La chica, al parecer, estuvo por la mañana barriendo la terraza del chalé y, al acabar, decidió darse un baño. Todo apunta a que, cuando ya estaba en el agua, sufrió un corte de digestión, una lipotimia o un desmayo por un golpe de calor y perdió el conocimiento y se ahogó. Su esposo y los amigos estaban en el interior del chalé. No escucharon nada. Ni siquiera un leve grito ni un braceo, según declararon. Al salir, ya encontraron el cuerpo flotando boca abajo. Llevaba así muchos minutos. Lo sacaron a toda prisa de la piscina y avisaron del accidente. Primero llegó una patrulla de la Policía Local, que intentó sin éxito reanimar a la chica. Luego, los sanitarios del SAMU también intentaron recuperarle el pulso.
El accidente ocurrió alrededor de las 12.30 horas. La Policía Judicial de la Guardia Civil también acudió al chalé. Tomó declaración a los otros inquilinos. Todos coincidieron en que la chica había estado limpiando la terraza mientras ellos dormían. Y luego la encontraron flotando en la piscina.
El dueño del chalé explicó a este diario que incluso las chanclas de la joven estaban alineadas en el borde de la piscina, donde ella las había dejado antes de meterse en el agua para refrescarse. Indicó que él mismo acudió al aeropuerto el día anterior a recoger a la pareja. «Estaban de paso. Iban a pasar dos días aquí y se marchaban», dijo, y comentó que la chica, pese a que no era mayor de edad, estaba ya casada pues pertenece a la etnia gitana y es habitual que sus mujeres contraigan matrimonio muy jóvenes.
El chalé donde ocurrió el suceso está en la partida de la Llobella, en el litoral de Benissa. A los vecinos, les llamó la atención la presencia de coches de la Guardia Civil y de la Policía Local, pero ninguno de ellos sabía que había fallecido una chica en una piscina. En lo que va de verano, no se había producido hasta ayer ninguna muerte por ahogamiento en las piscinas de la Comunidad.
